Muchas parejas piensan que tener un bebé es dejar de hacer todo lo que se hace hasta el momento previo a su nacimiento; salir a cenar, pasear, ir de viaje . Esto último puedes hacerlo perfectamente con tu pequeño/a, y si no te atreves, echa un vistazo a los consejos que tienes a continuación y ponlos en práctica:
– Hora de salida
Sal en la franja horaria que tu bebé esté más tranquilo (suele ser la noche), aprovechando que se pueda quedar dormido, y no lo pase mal durante el trayecto. No tengas miedo de que se duerma en su silla; si lo hace, solo has de preocuparte de que su cabeza y su columna estén alineadas.
– No abras las ventanillas
La corriente de aire no le conviene nada a tu bebé.
– Temperatura
Viaja con el climatizador a una temperatura constante, que ronde los 20 ºC, y antes del emprender el viaje, airea el vehículo ya que las temperaturas extremas y los cambios bruscos son contraproducentes para tu niño/a.
– Escoge rutas que permitan realizar paradas
Necesitarás bajar del coche cada dos horas (aproximadamente), para refrescarte la cara, mover las piernas, desentumecer el organismo quieras o no, tu bebé lo agradecerá aunque esté dormido.
–Evita el sol
A la hora de estacionar, hazlo a la sombra ya que las partes metálicas del coche podrían dañar al pequeño al calentarse demasiado.
Por último, recuerda revisar dos veces tu equipaje, que no falte lo esencial para el bebe, alimento, cambio de ropa, medicina etc
Ahora que sabes todo esto, ¿te animas a planear un viaje con tu pareja y vuestro pequeño/a?.